viernes, 28 de noviembre de 2014

LA CEPA SHIRAZ, TAMBIEN LLAMADA SYRAH



El vino es el amigo del sabio y el enemigo del
borracho. Es amargo y útil como el consejo del
filósofo.  Está permitido a la gente y prohibido a
los imbéciles. Empuja al estúpido hacia las tinieblas
y guía al sabio hacia Dios.
AVICENA (980-1037)


Los ampelógrafos, nombre que reciben los científicos quienes se encargan de identificar y clasificar las diversas variedades de la vid (Vitis vinífera), han manifestado que existen más de diez mil variedades ---igualmente denominadas cepas y vidueños--- en todo el mundo. En el portal www.videsyvinos.com leo que “Durante la era terciaria, en el período cretácico, aparecieron las plantas sobre la faz de la tierra y con ellas, las vides. Estas plantas antiguas eran muy diferentes a la vid cultivada que conocemos hoy. Su forma era la de verdaderas enredaderas que trepaban a los árboles, dejando caer sus lianas. En la era cuaternaria, cuando el hombre apareció sobre la tierra, se encontró con esta vid silvestre que lo atrajo con la delicia de sus frutos. Y que cuando el hombre dejó de ser nómada,  para transformarse en sedentario, comenzó a domesticar animales y plantas, y fue a partir de entonces que la vid inició su evolución de Vitis silvestris (vid silvestre) a Vitis vinífera sativa (vid cultivada).”

Me parece conveniente agregar que existen unas cincuenta especies del género botánico denominado Vitis, y que en este mismo género están comprendidas ---junto a la Vitis vinífera--- la Vitis rupestirs, la Vitis aestivalis. La Vitis riparia, y  la Vitis labrusca.  

Se tiene conocimiento que el cultivo de la vid, en sus más remotos orígenes, comenzó en la zona llamada Transcaucasia, ubicada entre el Mar Caspio y el Mar Negro, donde actualmente se hallan Georgia (en el idioma de este país el vocablo que designa al producto de la fermentación del jugo de la uva es Gvino) y Armenia. Desde estos lugares se propagó ese cultivo hacia otras áreas de Occidente, donde prosperó y se tornó intensivo. Y se considera que fue Sumeria, al sur de Babilonia, el primer país donde el cultivo de la vid alcanzó un notable desarrollo.

De ese amplísimo número de variedades  (algunos hacen que esa cifra se incremente hasta veinte mil, pero conviene tener en cuenta que en este crecido número seguramente están comprendidos los sinónimos de infinidad de cepas, y por ello el número es muy grande)  una de ellas entraña una historia en verdad curiosa: la Syrah, también llamada Shiraz. Se trata de una cepa tinta, la cual (según leo en el boletín de la Asociación Dominicana de Sommeliers, publicado el 25 de septiembre de 2013) “tiene otros nombres: Candive Noir, Entournerein, Hermitage, Hignin Noir, Petite Syrah, Plan de la Biaune, Schiraz, Serine, Seräne, Shiraz, Sirac, Sirah y Syra. Es un dato importante saber que el nombre de Syrah proviene de las zonas frías de Francia y la denominación de Shiraz proviene de las zonas cálidas de Australia. Hay muchas controversias con respecto al origen de esta uva. Hay quien dice que es originaria de la ciudad persa de Shiraz, desde donde fue llevada a Galia (antigua Francia). Otros piensan que es originaria de la ciudad de Siracusa, en la isla Italiana de Sicilia. Se encuentra una plantación de esta uva en el centro y sur de Francia, lo que hace pensar que su origen es el Ródano. Esta variedad fue llevada a Australia, donde es llamada Shiraz. También se cultiva en Chile, EEUU, Argentina; Italia, España, Venezuela, Perú, México, Sudáfrica, Brasil”. Hasta aquí esta cita..

Esa prudente señalar que  en  el blog que lleva por título Por el placer del Vino apareció publicado, el 30 de mayo de 2013, un breve texto acerca de esta variedad de Vitis vinífera, el cual asienta lo siguiente: “A lo largo de la historia de la uva y el vino, se han generado muchos mitos que debido a que se repiten mucho o se dicen con mucha seguridad, se  termina considerándolos como realidades.  Uno de estos mitos es el origen de la uva Syrah.  Me ha tocado asistir a pláticas por enólogos, sommeliers y apasionados del vino en donde se maneja que el origen de esta uva es Shiraz, Persia (hoy Irán), Siracusa, Sicilia, Italia, o la Isla de Saria, Grecia.  Además de la similitud del nombre de estos lugares con el nombre de la uva Syrah, no existen evidencias históricas documentales o ampelográficas (características morfológicas de la uva y la vid) sobre la presencia de esta uva en estas localidades.  Por otro lado, se tienen documentos que describen la presencia de la uva Syrah desde hace varios siglos en Francia.  Hasta antes de 1950, la uva Syrah era utilizada en general para producir vinos locales con poca exposición en los mercados internacionales.  En 1958 solo había 3,000 hectáreas de esta uva en Francia, pero debido a su reciente popularidad, ahora se han plantado cerca de 100,000 hectáreas”. 

En otra fuente de información (el boletín Vinamigos, del 2 de marzo de 2014 ) apareció un texto de Natalia López Mota, donde señala que “Las dos formas más comunes en las que conocemos esta variedad son Syrah y Shiraz. Syrah mayoritariamente usado en Francia, resto de Europa, Argentina, Chile y Estados Unidos. Shiraz mayoritariamente usado en Australia y Nueva Zelanda. Otros nombres menos comunes con los que se le puede encontrar pueden ser Schiras, Sirac, Syra, Syrac, Serine, Sereine, Antourenein Noir, Balsamina, Candive, Entournerein, Hignin Noir, Marsanne Noir y Hermitage. Este último, nombre de una denominación de origen protegida  muy renombrada de Francia, ubicada en la zona de la que proviene esta variedad. Este nombre lo usó Australia como nombre de la variedad hasta los años ochenta, cuando el nominarla de esta forma comenzó a causar problemas al querer exportar. Por muchos años se pensó que la uva era originaria de Persia (ahora Irán) de una ciudad llamada Shiraz. A partir de varios estudios ahora se sabe que esta variedad es originaria de Francia del Valle de Ródano (Côtes-du-Rhône), y a partir de pruebas de DNA sabemos que sus padres son la variedad tinta Dureza y la variedad blanca Mondeuse Blanche”.

Ahora bien, los enófilos de todo el orbe están de acuerdo en que los vinos elaborados con la cepa Syrah se caracterizan por su color rubí, rojo intenso, con tonalidades de color frambuesa. A la olfacción se distinguen por sus aromas frutales ---ciruelas, zarzamoras, frambuesas, cerezas, grosellas---, así como notas florales y especiadas. A la boca son vinos de muy buen cuerpo, carnosos, bien estructurados,  

Como curiosidad enológica acerca de los vinos más caros del mundo señalaré que en el portal Cocina y Vino.net apareció una nota de los cinco vinos de mayor precio. En ella queda registrado que una botella de vino elaborado en Australia, con la cepa Shiraz, figura al lado de otros cuatro vinos franceses, de Burdeos. La información consigna que “La botella de vino más costosa de la historia fue una de Château Lafitte, cosechada en 1787, según la revista económica Forbes. Su valor es de $156.450 dólares. Se piensa que perteneció a Thomas Jefferson. En segundo lugar está Château d'Yquem, cosecha 1787, valuada en $100.000 dólares. Es de una viña ubicada en Burdeos, Francia. Está elaborado con Chenin Blanc  y es dulce. El tercer puesto lo ocupa el Penfolds Grange Hermitage, de la cosecha 1951, cuyo costo es de $50.200 dólares. Este vino fue el experimento del productor Max Schubert y colocó al Syrah australiano en el mapa vinícola. El cuarto vino más caro del mundo es el Cheval Blanc. Concretamente la botella cosecha 1947, de 750 ml, fue vendida en 33.781 dólares. El último, pero no por ello mucho más barato, es el Château Mouton-Rothschild. La botella, cosecha 1945, costó $28.750 dólares”.
Con el deseo de conocer un poco más acerca de ese vino Shiraz de Australia, tan costoso, visité la pagina titulada The Trenders, del 9 de mayo de 2013, donde leí que “El vino  Penfolds Grange Hermitage es sin ninguna duda el referente de los  vinos australianos, y también el más caro, con algunas de sus botellas subastada por más de 30.000 euros (suma equivalente a quinientos cuarenta mil pesos mexicanos). En la Región de Barossa, una de las zonas vitivinícolas más prestigiosas del sur de Australia, y gracias al Enólogo Max Schubert se elaboró en 1951 el primer Penfolds Grange Hermitage, compuesto predominantemente de uva de Shiraz y, por lo general, un pequeño porcentaje de Cabernet Sauvignon (14%). Se convierte en un vino con gran carga de color, aromas complejos y poderosa expresión en boca. Del cual se hacen entre 80 mil y 110 mil botellas anuales. El resultado son vinos potentes y exóticos”. 

Ahora que me ocupo de mencionar diversos pormenores de la cepa Syrah (o Shiraz) recuerdo muy gratamente que el día 23 de febrero de 2005 el Grupo Enológico Mexicano llevó a cabo una ceremonia, en el salón “Terraza”, en el restaurante Hacienda de los Morales, para galardonar a la empresa Casa Madero   Esa fue la primera ocasión  ---y hasta la fecha la única--- que ese grupo de enófilos premia a una vitivinícola nacional, y  la primera que otorgó la presea denominada “Racimo de Platino”, que fue entregada a José Milmo Garza-Madero, Director General de la compañía que ostenta la distinción de haber sido (por el hecho de que su fundación, en Parras, Coahuila, se remonta al año 1597)  la primera bodega vitivinícola del continente americano..

Para José Milmo ese reconocimiento fue la culminación de décadas de inversiones en viñedos y en bodega, lo que hasta ese  momento tenía como resultado haber obtenido 127 medallas de oro, plata y bronce en prestigiosas competencias internacionales, a más de numerosos Reconocimientos y Diplomas que, en su momento, le fueron otorgados a Casa Madero, por la excelente calidad de sus vinos. Y conviene agregar que merced a la notoria calidad de esos vinos esta empresa exportaba, en aquellos días, más del 80% de su producción y sus vinos se hallaban presentes en 23 países, principalmente en el continente Europeo. Otros tres reconocimientos (hechos, al igual que el “Racimo de Platino”, por el escultor y medallista Lorenzo Rafael), denominados “Racimo de Oro” fueron entregados, en esa misma ceremonia, a personal clave de Casa Madero: el viticultor Daniel Muñoz, el enólogo Francisco Rodríguez y el director de la bodega Alfonso Cárdenas.  Al recibir la presea “Racimo de Platino” José Milmo anunció la introducción en el mercado nacional del  “mejor vino que ha producido Casa Madero en sus 408 años de existencia: El Gran Reserva Casa Grande Shiraz, cosecha 2001”, del cual únicamente se elaboraron 1,000 cajas.

Concluyo diciendo que José Milmo, fallecido el 22 de diciembre de 2010, a la edad de 72 años,  fue un dilecto amigo mío, de imperecedera memoria, a quien ahora recuerdo en estas líneas.Principio del formulario
Final del formulario
















La cata “ciega” número 246 del Grupo Enológico Mexicano se llevó a cabo el jueves 27 de noviembre, y en esa degustación fueron analizados sensorialmente ocho vinos elaborados en México con la variedad  Syrah (en realidad fueron siete vinos mexicanos, ya que uno de los catadores llevó un vino elaborado en Australia).

La Mesa de Catadores estuvo integrada  por los siguientes enófilos:
Patricia Amtmann,  Juan Ignacio Torreblanca, Joaquín López Negrete Amtmann, Rafael Fernández, Philippe Seguin, Mauricio Romero, y Miguel Guzmán Peredo.

En estas degustaciones analíticas, en las cuales los catadores ignoran la marca y la procedencia de los vinos que van a degustar  los enófilos que participan en esas degustaciones sensoriales califican las características visuales, olfativas y gustativas de cada uno de los vinos, escribiendo junto con la puntuación otorgada en cada uno de estos tres renglones, sus comentarios respecto al color, al aroma o bouquet y al sabor de cada uno de los vinos sometidos al examen organoléptico de los miembros de la Mesa de Catadores que en esa ocasión participaron en dicha degustación. Una vez fueron analizadas esas características sensoriales, y  que se tiene inmediato conocimiento de cuál fue la calificación alcanzada por cada vino (momento éste en el que son descubiertas las botellas y se conoce de qué vino se trata en cada caso), cada catador  formula en voz alta sus propios comentarios, con la finalidad de escuchar las opiniones de los restantes catadores, enriqueciéndose, de esta manera, el imparcial juicio emitido por cada uno de esos enófilos.

Las calificaciones están basadas en los parámetros que maneja el Grupo Enológico Mexicano. Aquellos vinos cuya calificación oscila entre los 50 y los 59 puntos son considerados “no recomendables”. Si la puntuación se halla comprendida entre los 60 y los 74 puntos, son juzgados “bebibles”. Una calificación entre los 75 y los 84 puntos permite evaluarlos como “buenos”. Si el puntaje oscila entre los 85 y los 94 puntos, son juzgados “muy buenos”. En el caso de que la calificación esté comprendida entre los 95 y los 100 puntos, entonces alcanzan la categoría de “extraordinarios”.
Los resultados fueron los siguientes:
1.- Tierra Adentro Syrah. Cosecha 2011. Monovarietal 100% Syrah. 13.6% Alc. Vol. Crianza de doce meses en barrica de roble francés ( el 75% del vino) y 25% estadounidense el 25% restante. Campo Real Vinícola. Trancoso, Zacatecas. Calificación: 87.00   puntos  Precio: $ 430.00  (Aportación de Mauricio Romero Gatica)

2.- Balché 2012 Syrah, cosecha 2008. Monovarietal 100% Syrah. 13.8% Alc. Vol. Crianza de 24 meses en barrica de roble francés de primer uso. Edición limitada a 6.200 botellas. Bodega Barón Balché. Valle de Guadalupe, Ensenada. Baja California. Calificación: 86.71  puntos. Precio: $ 2.228.00 (Aportación de Patricia Amtmann)

3.- McWilliam’s Hanwood  Estates Shiraz, cosecha 2008. Monovarietal 100% Shiraz. 13.5% Alc. Vol. Sin información de la crianza. Elaborado por la bodega  McWilliam’s Hanwood  Estates, South Eastern Australia, Calificación: 85.14   puntos. Precio: $ 222.0.00. (Aportación de Philippe Seguin)

4.- Casa Grande Gran Reserva Shiraz. Cosecha 2010. Monovarietal 100% Shiraz. 13.90 % Alc. Vol. Crianza de 24 a 26 meses en barricas roble estadounidense y de Europa del Este.. Casa Madero. Parras, Coahuila. Calificación: 84.43  puntos  Precio: $ 400.00  (Aportación de Joaquín López Negrete Amtmann)

5.- Casa Grande Parras Estate Shiraz Reserva Especial. Cosecha 2001. Monovarietal 100% Shiraz. 13.90 % Alc. Vol. Crianza de 24 a 26 meses en barricas nuevas de roble estadounidense. Casa Madero. Parras, Coahuila. Calificación: 84.28  puntos  Precio: $ 705. 00 (Aportación de Miguel Guzmán Peredo)

5.- (Empate) Syrah Las Nubes. Cosecha 2012. Monovarietal 100% Syrah. 13.9% Alc. Vol. Crianza de doce meses en barricas francesas y estadounidenses. Bodegas y Viñedos Las Nubes. Ensenada, Baja California, Calificación: 84.28  puntos.  Precio; $ 577.00 (Aportación de Patricia Amtmann).
6.- Casa Grande Reserva Cabernet Sauvignon-Syrah, cosecha 2010. Coupage de 70% Cabernet Sauvignon  y  30% Shiraz.  13.9 % Alc. Vol.   Añejamiento en  barrica nueva  por 12 meses y 12 meses en barricas de segundo uso, de Francia, Europa del este y Estados Unidos de América. Guarda de un año en botella.  Casa Madero. Parras, Coahuila. Calificación: 83.86  puntos  Precio: $  450.00   (Aportación de Juan Ignacio Torreblanca)
7.-  Syrah Vino de la Reina. Cosecha 2011. Monovarietal 100% Syrah. Crianza de 14 meses en barrica francesa. Viñedos de la Reina. Tijuana, Baja California. Calificación: 83.00  puntos. Precio $ 450.00  (Aportación de Rafael Fernández Flores):

Los catadores allí presentes eligieron “mejor etiqueta” la del vino Casa Grande Reserva Cabernet Sauvignon-Syrah, cosecha 2010, de Casa Madero..