lunes, 23 de agosto de 2010

CATA DE DIEZ VINOS MEXICANOS


Hace poco mas de ocho años, en ocasión de la cata “ciega” numero 80 del Grupo Enológico Mexicano, celebrada en el mes de febrero de 2002, escribí acerca de los vinos elaborados en nuestro país. En ese artículo periodístico consigné que México fue el primer país en el continente americano donde fueron sembradas vides, con la finalidad de elaborar vino. El mérito de haber sido el principal promotor de la vitivinicultura mexicana --entonces esta ubérrima tierra era denominada Nueva España— corresponde a Hernán Cortés, quien, mediante el decreto del 20 de marzo de 1524, dejó establecido que cada encomendero que tuviese cien indígenas en “encomienda” debía sembrar mil sarmientos, “escogiendo la mejor que pudiesen hallar”.
Conforme fueron transcurriendo los años y las décadas, las viñas en el virreinato más floreciente de la corona española en América se extendieron por doquier, incluso a las regiones más apartadas de la capital novohispana. En el año 1597 fue fundada la empresa Bodegas de San Lorenzo (en la Hacienda de Santa María de las Parras, en el actual estado de Coahuila), que ha estado en operación continua hasta el presente, denominada Casa Madero, que se ostenta ---con justa razón--- como la bodega más antigua del continente americano, y una de las más antiguas del mundo
Más tarde, durante el siglo XVIII, los misioneros jesuitas propagaron los viñedos hacia la península de Baja California, y de aquellos alejados lugares salió en 1769 el monje franciscano Junípero Serra hacia la Alta California (que entonces pertenecía a la Nueva España, con el fin de propagar la evangelización cristiana. Las primeras viñas sembradas en tierras que hoy en día son Estados Unidos de América lo fueron en torno a la Misión de San Diego de Alcalá, la primera de las muchas que fundó Junípero Serra en aquellas tierras..

La historia de la vitivinicultura mexicana ha sido en extremo irregular, sin que se haya registrado un verdadero progreso, constante y claramente ascendente, al paso de los siglos. Durante algún período de tiempo, en las dos últimas centurias, ha parecido que este importantísimo cultivo vislumbrara un constante desenvolvimiento, pero pasados los años diversas circunstancias, complejas y conflictivas, han hecho que esa industria decayera u mostrara un franco retroceso.

Durante la cuarta década del siglo pasado los productores de vino de Baja California (en el Valle de Guadalupe y áreas circunvecinas están ubicadas las principales bodegas vitivinícolas de México, y es allí donde tienen su origen algunos de los mejores vinos de nuestro país) comenzaron a elaborar caldos de mejor calidad. Y es notorio e innegable que, al presente, los vinos de esas regiones ---lo mismo que los del Valle de Parras, en Coahuila, y de Ezequiel Montes, en Querétaro--- son de extraordinaria calidad, lo que les ha permitido ocupar honrosos lugares en infinidad de certámenes enológicos, en diversos países del mundo.

Información más actualizada acerca de los vinos mexicanos la encontré en el reportaje titulado “Vino mexicano: cinco siglos de historia”, escrito por Pilar Meré (quien ha tenido un estrecho vínculo con la promoción de los vinos elaborados en México) y publicado en la edición correspondiente al bimestre agosto-septiembre, de la revista “Sabor e Arte”. Allí queda consignada la siguiente información: “La viticultura mexicana ha desarrollado más de mil hectáreas de viñedos en el país. Sólo entre 2005 y 2008 se cultivaron más de cuatrocientas nuevas hectáreas y repuesto otras doscientas cincuenta hectáreas de viñedos antiguos por nuevos. ....Desde 1998, el mercado del vino en México había tenido un crecimiento ascendente, qued en los últimos años alcanzó un crecimiento del 12% ponderado....En su afán de expansión comercial, nuestro país crece en sus exportaciones, En 2007 la exportación fue de un 18%. Para 2008 exportó alrededor del 20% de la producción de vinos (blancos, tintos, rosados y espumosos...La calidad mundial del vino mexicano está avalada por la obtención de más de cuatrocientos reconocimientos y premios a nivel internacional, a través de su participación en los concursos mundiales...Hoy el vino mexicano tiene un lugar relevante en el panorama mundial enológico. Actualmente la industria mexicana está integrada por mas de medio centenar de empresas y productores, ubicados en las cinco zonas vitivinícolas registradas. Casi el 95% de ellas en Baja California, y el resto en Coahuila, Querétaro, Zacatecas y Aguascalientes.. En su conjunto, ofrecen más de trescientas etiquetas de vino, entre tintos, blancos, rosados y espumosos, elaborados con la más modera tecnología y con la mano experta de enólogos profesionales. Las bodegas vitivinícolas nacionales más productivas y representativas exportan sus productos casi a treinta países”. Hasta aquí esa cita.

Para la cata “ciega” número 195, realizada el viernes 20 de agosto, cata uno de los catadores aportó un vino nacional (a diferencia de otras ocasiones, cuando son seleccionados ocho vinos, cuatro blancos y cuatro tintos, de una bodega vitivinícola, nacional o extranjera), y de esta manera la degustación se llevó a cabo con diez caldos nacionales, elaborados en Baja California.

La Mesa de Catadores estuvo integrada esa tarde por Patricia Amtmann, Alejandra Vergara, Gustavo Riva Palacio, Joaquín López Negrete, José del Valle Rivas, Mauricio Romero, Miguel Guzmán Peredo, Philippe Seguin, Rafael Fernández Flores y Roberto Quaas Weppen. .

Las calificaciones están basadas en los parámetros que maneja el Grupo Enológico Mexicano. Aquellos vinos cuya calificación oscila entre los 50 y los 59 puntos son considerados “no recomendables”. Si la puntuación se halla comprendida entre los 60 y los 74 puntos, son juzgados “bebibles”. Una calificación entre los 75 y los 84 puntos permite evaluarlos como “buenos”. Si el puntaje oscila entre los 85 y los 94 puntos, son juzgados “muy buenos”. En el caso de que la calificación esté comprendida entre los 95 y los 100 puntos, entonces alcanzan la categoría de “extraordinarios”.

Las calificaciones fueron las siguientes:

1.- Artigiano, cosecha 2008. 13% Alc. Vol. Monovarietal 100% Cabernet Sauvignon. Crianza de 12 meses en barricas de roble francés y estadounidense. Bodega Fratelli Pasini. Valle de San Antonio de las Minas. Ensenada, Baja California. Calificación: 89.38 puntos

2.- Único Gran Reserva, cosecha 2002. 13.5% Alc. Vol. Coupage de 56% Cabernet Sauvignon y 35% Merlot. Crianza de 18 meses en barrica de roble francés y 12 meses en botella. Bodegas de Santo Tomás. Valle de Santo Tomás, Ensenada, Baja California. Calificación. 87.00 puntos

3.- Reserva Magna, cosecha limitada 2005. 14.2% Alc. Vol. Coupage de Nebbiolo y Petite Syrah. Crianza de 18 meses en barrica nueva de roble francés. Casa Pedro Domecq. Valle de Calafia. Ensenada, Baja California. Calificación: 86.88 puntos

4.- Ojos Negros Gran Reserva, cosecha 2004. 13.9% Alc. Vol. Coupage de Cabernet Sauvignon, Shiraz, Cabernet Franc y Merlot. Bodega San Rafael. Valle de Ojos Negros, Ensenada, Baja California. Calificación 86.00 puntos

5.- Santa Úrsula Cabernet Sauvignon, cosecha 2006. 13% Alc. Vol.
Monovarietal 100% Cabernet Sauvignon. Crianza de 18 meses en barrica de roble francés. Bodega Santa Úrsula. Valle de Guadalupe, Ensenada, Baja California. Calificación
85.50 puntos.
:
6.- Duetto Meritage tinto, cosecha limitada 1999. 13% Alc. Vol. Coupage de 60% Cabernet Sauvignon y 40% Merlot, de los valles de Santo Tomás, en Ensenada, Baja California, México, y Livermore, en California, Estados Unidos de América. Crianza de 14 meses en barrica nueva de roble francés. Bodegas de Santo Tomas y Wente Winery, de México y Estados Unidos de América, respectivamente. Calificación: 85.38 puntos

7.- Santa Úrsula Valdepeñas, cosecha 2006. 13% Alc. Vol. Monovarietal 100% Tempranillo. Crianza de 18 meses en barrica de roble francés. Bodega Santa Úrsula. Valle de Guadalupe, Ensenada, Baja California. Calificación 85,25 puntos:

8.- Nebbiolo Reserva Limitada, cosecha 2005. 14.5% Alc. Vol. Monovarietal 100% Nebbiolo. Crianza de 14 meses en barrica y 24 meses en botella. Vinícola L.A. Cetto. Valle de Guadalupe, Ensenada, Baja California- Calificación: 84.63 puntos.

9.- Divino tinto, cosecha 2008. 14% Alc. Vol. Coupage de 80% Syrah y 20% Cabernet Sauvignon. Crianza de 6 meses en barrica de roble francés. Bodega MD Vinos. Valle de la Grulla. Ensenada, Baja California. Calificación: 83.25 puntos

10.- Merlot Monte Xanic, cosecha 2006. 13.5% Alc. Vol. Monovarietal 100% Merlot. Crianza de 18 meses en barrica de roble francés. Monte Xanic. Valle de Guadalupe, Ensenada. Baja California. Calificación: 82.50 puntos.

Salta a la vista la encomiable calidad de los vinos evaluados, ya que siete de los diez vinos catados alcanzó una calificación superior a los 85 puntos, lo que permitió ubicarlos en la categoría de “muy buenos”

Al concluir la evaluación organoléptica los catadores saborearon una espléndida cena, ofrecida por Patricia Amtmann, y los platillos fueron maridados con el vino “Duetto”, cosecha 1999.

jueves, 5 de agosto de 2010

CATA DE VINOS DE LA BODEGA MONTE XANIC


El vino siembra poesía en los corazones.
DANTE ALIGHIERI
(1265-1321)

Ensenada, ciudad portuaria del estado de Baja California, es el eje neurálgico de la más importante región vitivinícola de México, ya que allí es elaborado el 90% del vino nacional.

En torno a esta progresista urbe, bañada por las frías aguas del Océano Pacífico, se ubican diversos valles de acentuada vocación vitícola. Entre otros puedo mencionar los siguientes: Guadalupe, Santo Tomás, San Vicente, San Antonio de las Minas, Ojos Negros y La Grulla. Hacia el Norte, en dirección a la ciudad de Tecate, está el Valle de Las Palmas..

En las áreas líneas arriba señaladas hay aproximadamente cincuenta vinícolas, contando las
pequeñas, las medianas y las grandes. Entre éstas últimas, son cinco las bodegas de
producción más considerable, tanto por su cantidad como por su calidad (las cuales gozan
de merecido prestigio, lo mismo a nivel nacional que internacional, atestiguado este
reconocimiento por el elevado número de medallas y distinciones obtenidas en los
certámenes más prestigiados del orbe), una de ellas Monte Xanic, cuyas instalaciones,
frente a un hermoso recinto lacustre, llamado “El Laguito”, se localizan en el Valle de
Guadalupe, en las inmediaciones del poblado Francisco Zarco..

La palabra Xanic es un vocablo de la lengua cora, hablada por los indígenas que habitan la parte noreste del estado de Nayarit, especialmente en la zona montañosa de la Sierra Madre Occidental. Significa “la flor que brota después de la primera lluvia".

Cabe recordar que en la historia de esta bodega vitivinícola, cuya fundación se remonta al año 1987, figura la anécdota siguiente: “En noviembre de 1987, durante la primer visita a las veinte hectáreas que hoy forman parte de nuestros viñedos, iniciaba la temporada de lluvia y los montes estaban cubiertos de flores; esta señal nos pareció indicar que este nombre "Monte Xanic" era el más apropiado”.

La intención de los socios creadores de Monte Xanic fue la de elaborar un vino de gran finura y calidad, y pensando que serían las cepas propias de Burdeos las que mejor expresividad tendrían a la hora de producir vinos de excelente clase, se inclinaron por sembrar las variedades Cabernet Sauvignon, Merlot, Cabernet Franc, Petit Verdot, Malbec, Sauvignon Blanc y Semillon, y decidieron también elaborar vinos con cepas propias de otras regiones francesas, utilizando para ello vidueños como Chenin Blanc, Chardonnay y Syrah.

A mi parecer es conveniente transcribir dos párrafos de la página oficial de esta acreditada empresa vitivinícola mexicana, que a la letra dicen: “Monte Xanic nace en 1987 en un momento en el cual las opciones de vino en el mercado eran muy escasas. Cinco amigos, todos amantes del vino, tuvieron la visión de crear el primer vino mexicano Super Premium. Aunque para muchos parecía una locura, se aventuraron al proyecto adquiriendo tierras para el cultivo de la vid en el Valle de Guadalupe y la mejor tecnología disponible para crear vinos de calidad mundial. Así dio inicio una nueva era en la industria vitivinícola mexicana. Eran, aquellos, los últimos años de la década de los ochenta, y las fronteras habían sido abiertas a los vinos extranjeros, y por ello muchas empresas vinícolas cerraron sus puertas ante la imposibilidad de hacer competencia a vinos de muy variada calidad, ofrecidos a precios por debajo de los locales, en un incipiente mercado que todavía creía que todo producto importado era mejor.

“En 1988 se produjeron nuestros primeros vinos, el Chenin Colombard y el Cabernet Sauvignon. La primera cosecha de Monte Xanic salió al mercado en 1989 con 6,200 cajas de nuestro Chenin Colombard. Hoy en día Monte Xanic produce 45,000 cajas anualmente repartidas entre 14 etiquetas bajo 3 marcas: Monte Xanic, Gran Ricardo y Calixa. Las tres con la calidad y consistencia que nos han caracterizado durante veinte y un años”.

En 2008 Monte Xanic, empresa pionera en la producción de vinos Premium en México, cumplió veinte años de fructífera existencia. En ese momento se dio “a la tarea de renovar su imagen con una nueva etiqueta mas acorde al lenguaje visual del siglo XXI, cuyo diseño fue encomendado a Icon, despacho líder en el diseño de etiquetas de vinos Premium a nivel internacional. La estrategia de renovación incluye también la ampliación y modernización de la bodega, ubicada en el Valle de Guadalupe. La producción de la vinícola, no obstante, no rebasará el tope de cincuenta mil cajas al año, que es el límite para ser considerada una bodega “boutique”. Es en este rango de producción en el que se ubican las bodegas que producen los mejores vinos del mundo”.

Actualmente el viñedo de Monte Xanic cubre una superficie de cien hectáreas, y es Hans Backhoff el enólogo responsable de elaborar vinos de notoria calidad y exquisitas cualidades organolépticas. Estos caldos báquicos se hallan agrupados en cuatro líneas: Calixa, Monte Xanic, Edición Limitada y Gran Ricardo.. La primera de ellas comprende tres etiquetas: Calixa Chardonnay, Calixa Rosado y Calixa Cabernet Sauvugnon/Syrah. La línea Monte Xanic reune una doce de etiquetas, de los principales varietales blancos y tintos. La línea Edición Limitada está formada por varios vinos, entre los que yo destaco los deliciosos Syrah, Malbec y Petit Syrah. Los vinos de la marca Gran Ricardo constituyen la excelencia de la bodega Monte Xanic, ya que su elaboración, en añadas de gran clase, es objeto de cuidadosa crianza.

Considero pertinente enfatizar en el siguiente hecho: Los vinos de la marca Monte Xanic han sido galardonados ---en poco más de dos décadas de elaborar caldos de excelente calidad--- con aproximadamente un centenar de premios (medallas de oro, de plata y de bronce, además de reconocimientos diversos) en infinidad de certámenes internacionales, en los cuales se ha puesto de manifiesto su señalada calidad..

La cata “ciega” mensual número 194 del Grupo Enológico Mexicano, correspondiente a agosto de 2010, tuvo lugar en un salón privado del restaurante “Valkiria”, de Polanco. Ese día fueron degustados ocho vinos de la bodega vitivinícola Monte Xanic, ubicada en el Valle de Guadalupe, no lejos de la bajacaliforniana ciudad de Ensenada.

La Mesa de Catadores estuvo integrada esa tarde por los siguientes enófilos: Patricia Amtmann, Alejandro Guzmán Galán, Matthieu Guerpillon, Darío Negrelos, Roberto Quaas Weppen, Rafael Fernández Flores, Philippe Seguin y Miguel Guzmán Peredo.

Las calificaciones están basadas en los parámetros que maneja el Grupo Enológico Mexicano. Aquellos vinos cuya calificación oscila entre los 50 y los 59 puntos son considerados “no recomendables”. Si la puntuación se halla comprendida entre los 60 y los 74 puntos, son juzgados “bebibles”. Una calificación entre los 75 y los 84 puntos permite evaluarlos como “buenos”. Si el puntaje oscila entre los 85 y los 94 puntos, son juzgados “muy buenos”. En el caso de que la calificación esté comprendida entre los 95 y los 100 puntos, entonces alcanzan la categoría de “extraordinarios”.

Los resultados fueron los siguientes:

Vinos blancos:

1.- Calixa Chardonnay, cosecha 2009. 13.5% Alc. Vol. Monovarietal 100% Chardonnay. . Calificación: 88.00 puntos. Precio: $ 150.00

2.- Chenin Blanc cosecha tardía, 2009. 13.5% Alc. Vol. Monovarietal 100% Chenin Blanc. Calificación: 87.17 puntos. Precio: $ 173.00

3.- Sauvignon Blanc Viña Kristel, cosecha 2009. 13.5% Alc. Vol. Monovarietal 100% Sauvignon Blanc. Calificación: 82.17 puntos. Precio: $ 173.00

4.- Chenin Colombard, cosecha 2008. 13.5% Alc. Vol. Monovarietal 98% Chenin Blanc y 2% Colombard. Calificación: 81.50 puntos. Precio: $ 141.00

Vinos tintos:

1.- Calixa Cabernet Sauvignon/Syrah, cosecha 2008. 13.5% Alc. Vol. Coupage de 60% Cabernet Sauvignon y 40% Syrah. Crianza durante doce meses en barricas de roble francés.
Calificación: 89.83 puntos. Precio: $ 150.00

2..- Syrah/Cabernet Sauvignon, cosecha 2008. 13.5% Alc. Vol. Coupage de 60% Syrah y 40% Cabernet Sauvignon. Crianza durante doce meses en barricas de roble francés. Calificación: 88.83 puntos. Precio: $ 390. 00

3.- Cabernet Sauvignon/Merlot, cosecha 2007. 13.5% Alc. Vol. Coupage de 60% Cabernet Sauvignon, 20% Merlot, 10% Cabernet Franc, 5% Malbec y 5% Petit Verdot. Crianza durante dieciocho meses en barricas de roble francés. Calificación: 88.17 puntos.
Precio: $ 360.00


4.- Merlot, cosecha 2006. 13.5 % Alc. Vol. Monovarietal 100% Merlot. Crianza de dieciocho meses en barrica de roble francés. Calificación: .86.33 puntos Precio: $ 311.00

Es conveniente enfatizar que seis de los ocho vinos degustados rebasaron los 85 puntos, ubicándose en la categoría de “muy buenos”. Por este hecho dichos vinos aparecerán enlistados en el reportaje que el Grupo Enológico Mexicano publicará al concluir el año 2010, titulado “Los mejores vinos en México en el año 2010, según el Grupo Enológico Mexicano”.

Los otros dos estuvieron colocados en la banda de más de 80 puntos.

Otro pormenor digno de ser tomado en cuenta es la magnífica relación calidad/precio de los ocho vinos. de Monte Xanic evaluados en esta cata, especialmente del tinto Calixa Cabernet Sauvignoin/Syrah, calificado con 89.83 puntos, cuyo precio es de $ 150.00

Al concluir esta degustación fue servida una deliciosa cena, preparada por Christian Martínez, chef del restaurante “Valkiria”. Inicialmente saboreamos Calamares estilo Hanoi, crujientes, con salsa vinagreta de pescado, albahaca y hierbabuena, cilantro, comino e hinojo. En seguida, Ensalada silvestre con vinagreta de granada, queso de cabra, tocino y jitomate cherry. El manjar principal consistió en Pechuga de pollo doradita con salsa pipián y cacahuate, granos de elote y arroz a la mantequilla. El postre fue Pastel de elote con nueces y nogada, con helado de vainilla y un toque de jarabe de hierbabuena. Tan opípara cena concluyó con una aromática taza de café de olla, con piloncillo y canela.

Los vinos de la bodega Monte Xanic elegidos para acompañar estos guisos fueron los siguientes: Chenin Colombard, cosecha 2008. Chenin Blanc cosecha tardía, 2009 y
Syrah/Cabernet Sauvignon, cosecha 2008, con los cuales se hizo un magnífico maridaje entre platillos y vinos..