viernes, 12 de agosto de 2011

CATA DE VINOS SANJUANINOS DE ARGENTINA


El buen vino es una jovial criatura,

si de él se hace un bueno uso.

WILLIAM SHAKESPEARE

(1564-1616)

La república federal de Argentina está integrada por veintitrés provincias. Una de ellas de es la de San Juan, en la Región de Cuyo, la cual es una zona histórica y geográfica en la parte central occidental de dicho país que está conformada por las provincias de Mendoza, San Juan y San Luis. A los nacidos en esa Provincia ---y, por extensión, a los productos de esa región--- se les llama sanjuaninos, a diferencia del gentilicio de los naturales de San Juan, la capital y la ciudad más importante de Puerto Rico, quienes reciben el nombre de sanjuaneros.

La actividad económica más importante de la provincia de San Juan es la agricultura, y de ella sobresale la vitivinicultura, ya que la producción de vino corresponde al 22 % del total nacional. Mendoza ocupa el primer lugar, con el 70 %, y el tercer sitio lo ocupa Río Negro, con el 3 %. El 5 % restante de la producción de vino en Argentina está dado por el producido en Salta, La Rioja, Catamarca y Córdoba. El viñedo argentino, que cubre una superficie de casi doscientas treinta mil hectáreas (cifras de 2007), está localizado entre los 22° y los 42° de Latitud Sur. La producción anual de vino oscila en poco más de mil quinientos millones de litros, y por ello Argentina ocupa el cuarto lugar mundial, por atrás de Francia, Italia, España y Estados Unidos de América. Es el segundo exportador de vino en América del Sur, por atrás de Chile, y ocupa el lugar número trece, a nivel mundial, entre los principales países exportadores de este néctar etílico.

Otra información interesante acerca de la vitivinicultura argentina hace referencia a la extensión del viñedo en este país del Cono Sur. En 1990 cubría una extensión de 210.371 hectáreas. Cinco años más tarde se había incrementado esa superficie y sumaba 218.590 hectáreas. Las predicciones para el año 2006 eran que habría viñas en 221.709 hectáreas. Y las cifras oficiales para noviembre de 2008 informaban que la extensión era de 225.846 hectáreas. Por esos días había 26.194 viñedos distribuidos en 7 de las 23 provincias del país, donde hay 1.322 bodegas registradas (que elaboran más de cinco mil marcas diferentes). De ellas 348 son exportadoras.

Las provincias de Mendoza y San Juan, ambas vecinas de Chile, son las mayores productoras de vinos en Argentina, ya que la primera cuenta con el 70.33 por ciento de la superficie destinada a la vitivinicultura. San Juan ocupa el segundo lugar nacional con el 21.69 por ciento en ese renglón.

En el libro El pequeño Larousse de los vinos (la edición latinoamericana fue publicada en México, en 2007) se menciona que “al igual que en los grandes países productores de Europa, en los últimos treinta años ha habido una caída dramática en el consumo de vino por habitante. De noventa litros por año a fines de los años de 1970, bajó a un tercio. Los treinta y ocho millones de habitantes de Argentina consumen cada año unos treinta litros por persona”

Me llama la atención la noticia publicada por el boletín on-line Argentinewines.com, del pasado 5 de agosto de 2011, en el sentido de que la cerveza es la bebida etílica de mayor significado en el renglón ventas en Argentina, ya que el consumo es de 49 litros por año. En ese informe se destaca que “El consumo de cerveza viene ganando terreno en Argentina entre las bebidas alcohólicas, por sobre el de vino desde la devaluación de 2002, según un estudio de la consultora Abeceb.com y publicado este miércoles por La Gaceta. En 2010, el consumo total de cerveza alcanzó a 19,8 millones de hectolitros. Con esas cifras, el mercado de cervezas alcanza el segundo lugar en el total de las bebidas en general (19%) luego de las gaseosas (42%) y el más importante en las bebidas alcohólicas, por encima de los vinos (11%) y licores (1%).

“Por un lado, se da una tendencia a nivel mundial de reducción del consumo de vino no varietal, el cual se vio reemplazado en nuestro país por una mayor ingesta de cerveza en el consumo diario, lo que favoreció a la reducción de los efectos estacionales, que en general se concentra en los meses de más calor. Por otra parte, la cerveza también se ve favorecida en el consumo ocasional, por un diferencial de precios respecto a los vinos de mayor calidad. En el último año el consumo de cervezas subió un 6,5%, mientras que el de vinos se redujo un 5,6%. Asimismo es destacable el crecimiento del 2,5% durante 2009 mientras la economía se contrajo. Todo esto llevó a que en 2010, el consumo per cápita alcance su pico histórico, alcanzando una ingesta de 49 litros anuales por persona, un 159% más que hace 20 años”. Hasta aquí lo concerniente al incremento en el consumo de cerveza en Argentina.

En el año 2009 Argentina exportó más de trescientos sesenta millones de litros, cantidad que en relación con la comercialización foránea de 2006 significó un aumentó de 22.61 por ciento. Pero ante cifras tan halagüeñas cabe agregar que el consumo interno anual de vino disminuyó de 2.050 millones de litros, en 1983, a 1.230 millones de litros en 2003. según leí ---en su momento--- en un informe titulado “Diagnóstico estratégico para la creación de un plan de comunicación genérica del vino argentino en el mercado interno. Plan sobre el que se estructuraron las nuevas campañas de promoción del consumo de vino que se financiaron con fondos de la Corporación Vitivinícola Argentina.

Por otro lado quiero señalar que en la página de Bodegas y Viñedos Casa Montes leí que “Francisco Montes, inmigrante andaluz, tras décadas de exitosa tradición empresaria, fundó en 1992 esta empresa vitivinícola en la provincia de San Juan, remarcando el rasgo pionero de la familia. Emplazada junto a sus propios viñedos, en un predio de 176 hectáreas en Pozo de los Algarrobos, Caucete, cultiva uvas de alta calidad enológica. La bodega cuenta con tecnología de punta (principalmente francesas e italianas) para la elaboración de sus líneas básicas y de sus dos líneas premium. Las temperaturas y remontages en los tanques son controlados por un proceso computarizado y se elaboran exclusivamente las uvas de la propia firma, y los vinos se embotellan utilizando la línea de fraccionamiento instalada en la nave contigua a la principal. Luego se mantienen en stock los vinos de guarda en cava, o terminados y en cajas, los de la línea tradicional”.

En el Valle de Tulúm, en la localidad de Pozos de los Algarrobos, a una altitud de 700 metros sobre el nivel del mar (31° Latitud Sur), se hallan los viñedos de esta pujante empresa, cuyas viñas fueron sembradas en 1994. Allí se cultivan once variedades de uvas: Syrah, Cabernet Sauvignon, Cabernet Franc, Malbec, Tempranillo, Merlot, Chardonay, Tannat, Nero Davola, Viognier y Ancellota. Los comentarios acerca de ese paraje giran en torno a que “se está posicionando como una de las zonas vitivinícolas más prestigiosas del país, y así lo afirman los numerosos galardones nacionales e internacionales que distinguen sus vinos desde el año 2003 en concursos Vinandino 2003 y más recientemente Concurso Internacional Sub 30 de Mendoza donde su Viognier conquistara una medalla de Plata”.

La empresa Bodegas y Viñedos Casa Montes exporta sus vinos a veintidós países: diez de Europa, ocho de América, tres de Asia y uno de Oceanía. Estos productos están comprendidos en las líneas Ampakama, Don Baltasar y Alzamora. Cabe agregar que la palabra ampakama es un vocablo huarpe (los aborígenes que habitaron lo que hoy es la región de Cuyo hablaban esa lengua) que significa “tierra sin dueño”.

La cata mensual número 210 correspondiente a junio, tuvo lugar en un salón privado del restaurante “Valkiria”, la sede permanente de estas degustaciones analíticas. La Mesa de Catadores estuvo integrada esa tarde por los siguientes enófilos: Alejandra Vergara, José del Valle Rivas, Carlos Ruiz González, Gustavo Riva Palacio, Darío Negrelos, Roberto Quaas, Mauricio Romero y Miguel Guzmán Peredo.

Para esta degustación analítica fueron seleccionados ocho vinos de Bodegas y Viñedos Casa Montes, seis de ellos de la línea Don Baltasar y dos de la línea Alzamora.

Las calificaciones están basadas en los parámetros que maneja el Grupo Enológico Mexicano. Aquellos vinos cuya calificación oscila entre los 50 y los 59 puntos son considerados “no recomendables”. Si la puntuación se halla comprendida entre los 60 y los 74 puntos, son juzgados “bebibles”. Una calificación entre los 75 y los 84 puntos permite evaluarlos como “buenos”. Si el puntaje oscila entre los 85 y los 94 puntos, son juzgados “muy buenos”. En el caso de que la calificación esté comprendida entre los 95 y los 100 puntos, entonces alcanzan la categoría de “extraordinarios”.

Vino blanco:

Don Baltasar Chardonnay/Viognier, cosecha 2009. 13.8% Alc. Vol. Coupage de Chardonnay y Viognier. Fermentado en barrica nueva de roble francés. Calificación: 86.00 puntos. Precio: $ 195.00

Vinos tintos:

1.- Alzamora Malbec, cosecha 2008. 14.2% Alc. Vol. Monovarietal 100% Malbec. Crianza en barrica de roble francés de primer uso, durante doce meses. Producción: 24.000 botellas. Calificación: 88.50 puntos. Precio: $ 392.00

2.- Alzamora Syrah, cosecha 2008. 14.2% Alc. Vol. Monovarietal 100% Syrah. Crianza en barrica de roble francés de primer uso, durante doce meses. Producción: 15.000 botellas. Calificación: 87.83 puntos. Precio: $ 392.00

3.- Don Baltasar Malbec, cosecha 2008. 13.9% Alc. Vol. Monovarietal 100% Malbec. Crianza del 40% del vino en barrica de roble francés y americano durante nueve meses, y el 60% se mantuvo en tanques de acero inoxidable.. Calificación: 87.30 puntos. Precio: $ 195.00

4.- Don Baltasar Cabernet Franc, cosecha 2008. 14.2% Alc. Vol. Monovarietal 100% Cabernet Franc. Crianza en barrica de roble francés (80%) y americano (20%). Calificación: 87.16 puntos. Precio: $ 195.00

5.- Don Baltasar Petit Verdot, cosecha 2008. 14.4% Alc. Vol. Monovarietal 100% Pëtit Verdot. Crianza en barrica de roble francés (80%) y americano (20%). Calificación: 86.16 puntos. Precio: $ 195.00

6.- Don Baltasar Cabernet Sauvignon, cosecha 2008. 14.0% Alc. Vol. Monovarietal 100% Cabernet Sauvignon. Crianza en barrica nueva de roble francés durante nueve meses. Calificación: 86.00 puntos. Precio: $ 195.00

6.- (empate) Don Baltasar Syrah, cosecha 2008. 14.0% Alc. Vol. Monovarietal 100% Syrah. Crianza en barrica de roble francés (80%) y americano (20%) durante nueve meses. Calificación: 86.00 puntos. Precio: $ 195.00

Considero conveniente enfatizar en el hecho de que los ocho vinos evaluados rebasaron los 85 puntos de calificación, lo que los ubica en la categoría de “muy buenos”.

Al concluir la degustación analítica los catadores saboreamos una deliciosa cena de cuatyro tiempos, preparada por Cristian Martínez, chef del restaurante “Valkiria”. Con esos deliciosos guisos bebimos el vino blanco Don Baltasar Chardonnay/Viognier y los tintos Alzamora Syrah y Alzamora Malbec, estableciéndose un magnífico maridaje.